Cuando hablamos de branding, estamos hablando en palabras simples, en todo lo que engloba la construcción de una Marca.
En marketing digital, estamos acostumbrados a obtener resultados inmediatos, dado que así es como funciona esta metodología: el captar clientes en el menor tiempo posible, sorprenderlos con una buena estrategia visual, para que el usuario finalmente haga lo que nosotros esperamos que haga, convirtiéndose en un Lead.
Sin embargo, un aspecto que también debemos considerar al hacer publicidad y marketing, es otorgarle un valor a la marca, una identidad, para que esta funcione también en el mediano y largo plazo.
Y es en este punto en el que la construcción de un branding cobra relevancia, dado que poco sirve preocuparnos de lo inmediato e instantáneo, si finalmente la marca que estamos trabajando no tiene un enfoque a largo plazo.
Es por eso que el buen trabajo de colores, identidad visual, línea gráfica, inclusive la línea comunicacional, juega un rol importante dentro del proceso de una marca, para que esta finalmente pueda ser recordada no sólo por los anuncios que vemos, sino también por sus valores, su mensaje y su esencia.